miércoles, 26 de marzo de 2014
Encontrados y perdidos.
Sin hacer nada nos ponemos a pensar y mientras, vemos al sol pasar. Nos ilumina con su luz y nos recuerda momentos nuestros en los que eramos más que nosotros mismos, en los que realmente brillaste para mí. Sólo el sol en nuestras pieles y el día pasar, me hicieron pensar en ti, en nosotros. Historias nuestras de día van pasando, y las que fueron de noche se quedan en nuestras mentes. Todas nuestras noches bailando bajo las estrellas, inmortalizando el momento con un objeto sin sentimientos, que pudo captar todo lo que nosotros sentíamos. Aquel brillo en los ojos que iluminaba el cielo más que las propias estrellas; aquellas risas y aquel baile, que no se puede ni considerar ni baile, pero que fue nuestro momento y lo vivimos como si el sol no volviera a salir. Sólo la salida de las estrellas y el día muerto para algunos, me hicieron pensar en ti, en nosotros. Estábamos tan encantados el uno con el otro, encontrados y perdidos en una inmensidad de sentimientos y en un mundo donde todo podía pasar. Yo sólo pensaba en ti, y sigo pensando que podemos volar juntos para el resto de nuestras vidas. Pensando en ti, mis palabras vuelan. Aún hoy cuando pienso en ti, los momentos viajan en mi mente como un remolino y en el centro siempre hay uno diferente, y después de todo eso, aún me pongo nerviosa al hablarte y mis palabras vuelan, vuelan lejos. Estoy tan perdida y encontrada a tu lado, tú me pierdes y después me encuentras y por eso te necesito, porque eres todo. Hubo momentos en los que me perdiste y no estuviste para encontrarme, pero sé que recuerdas aquellas palabras que me decías, aquellas veces que me repetías que querías recordar nuestros días, nuestras noches, para el resto de nuestros días, y sé que las recordaste, ya que aquí estás, encontrándome de nuevo. Wings.
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